Conocida la candidata, candidatos, listas, programas y debate, haré un esfuerzo para no esforzarme sobre tanto ilustre no ilustrado. Alcanza la vida política un nivel bajo en calorías de preparación y formación que no es posible ni aceptable asentarse en la firmeza del escombro. Navegar en ese mundo es el precipicio del pueblo, y el pueblo exige que haya listas, al menos, con la ética de la moralidad y dignidad. No es admisible ni tolerable la elección de los que no se pueden elegir. Quienes confeccionan las listas no son conscientes de que las carencias de los elegidos pueden dejar en evidencia a la vuelta de cuatro plenos, a la cabeza visible descabezada. El que mide no puede desmedir.
Dices bien y dices claro, aquí hay una ruina de políticos que asusta. Hay que votar con cabeza.
ResponderEliminarHay un exceso de mediocridad que es evidente, no hay respeto por el pueblo, aquí lo que prima es cobrar todos los meses por encima de la formación que haya. Una verguenza.
ResponderEliminarHabrá gente que ya tiene el fracaso garantizado,y como tu dices, el que mide no puede desmedir, pero se da la circunstancia que hasta el que mide ya está desmedido.
ResponderEliminarEvencio, visto lo visto es indudable que tu post va cargado de razón y de razones para tu definición de lo que hay, MUCHO RUIDO Y POCAS NUECES. Las razones del por que de esos candidatos y esas listas es imaginable pero no admisible. Mucha mediocridad cuando hubieran podido hacer una mejor selección. Hay en ambos partidos mayoritarios gente con formación y valores que podrían dar buen juego y excelentes resultados a los que, a lo sumo, dejan sentados en el banquillo con la esperanza de una oportunidad que les permita despuntar. Muchos de ellos acabarán marchando hacia otros espacios donde poder expandirse. Las barreras arquitectónicas humanas “políticamente correctas” existentes en las ejecutivas de algunos(bastantes) partidos políticos es evidente y poco recomendable para la ciudadanía.
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