Estaba escuchando la elegía
de Miguel Hernández a su amigo Ramón Sijé por Jarcha y de pronto me vienes a la
memoria si es que alguna vez te fuiste de ella. El poeta republicano dejó
sembrada en su letra el alma y grabada en la piel cada palabra de una despedida
en la que se vive la angustia del amargo adiós. Sabedor eras de mi admiración
del poeta y no menos de ti, un socialista demócrata e integro, que supo hacer
de la amistad lo excelso. Aquí en la
reserva del silencio y con el afecto familiar de las letras paso estos
momentos, tratando de mitigar el dolor de tu ausencia y para que no me envuelva
el halo de la soledad, evocando relámpagos de amenas conversaciones que
compartimos y hoy meteoros convertidos en escritura para dejar un rayo de luz,
en la penumbra de un entrañable amigo. Descansa
en paz.
Tuve la fortuna de compartir con Valentin ocho años en la tarea de gestionar lo público.
ResponderEliminarSe va una ejemplar político como pocos, y mejor persona si cabe.
Jorge Planells
Mi más sentido pésame a toda su familia. Era una persona de la que se podía aprender al conversar. Honrada, honesta y leal a su partido político. Su "criterio político" era incuestionable, algo que solía aparecer con mucha frecuencia en distendidas conversaciones, en las que se notaba que sus conocimientos estaban a la altura de sus valores. (Q.E.P.D)
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