La barca del PP de Torrent
la sigue manejando “La Emértita” más allá de algún salpullido veraniego con
poca consistencia. Después del último Comité no veo ninguna alteración que me
haga pensar que puede llegar el Redentor para salvar a los cristianos de los
sarracenos. Lo evidente de este PP es que vaga por el mundo con más pena que
gloria, y es la animación de las tertulias y la comidilla de hambrientas
lenguas capaces de ordenar el desorden interior en la vía pública.
Se dice y se comenta y se comenta y se dice y ensordece el silencio. La realidad es tozuda y nada hay que haga pensar que habrá cambios pese a que tres o cuatro quieran cambiar.
ResponderEliminarAhora mismo reina la quietud a la espera de las incorporaciones de los nuevos ediles y es de esperar que si hay algún movimiento será sísmico.
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