El tema de Cataluña nos
demuestra la altura de los políticos que tenemos y están ahí porque los hemos votados. HAY QUE REFLEXIONAR. Causa
estupor ver tanta minusvalía de privilegiados del colectivo dando palos de
ciego y sumiendo al país en el pórtico de innecesarios desastres. “Hablando se
entiende la gente”, le dijo el Emérito a Carot Rovira pero se deduce la mudez
cuando estamos metidos de lleno en un conflicto de consecuencias imprevisibles.
Las
chapuzas avalan a una clase política esperpéntica.
Sin talla, sin clase y sin sentido común.
ResponderEliminarY sin vergüenza.
EliminarAburren los catalanes con formas que no ampara la ley. No siento ningún disgusto si consiguen la independencia. Adiós.
ResponderEliminarCon el norte perdido.
ResponderEliminar