Estimado amigo Sento:
Hace tiempo que no sé nada
de ti y mis piernas romas ya no están para viajes al Ayuntamiento (La casa de
la derecha) para compartir algún rato y disfrutar de tu sapiencia. Los años,
amigo, no perdonan y van deteriorando el cuerpo y dañando la memoria. ¿Todavía
sigues en tu par-tido? ¿Y qué novedades hay por La casa? ¿Jorge Planells sigue
de Alcalde? Cuéntame como paso. Mi vida se reduce a ver los documentales de la
2, a matar algunos ratos en el balcón y leer “Torrent al día” porque ya sabes
que el cómic me gusta mucho, vida sedentaria hijo, que es lo que toca. ¿Qué fue
de Campos? Me contaron que era Jefe de la oposición pero en la vida política ya
sabes que hoy eres el primero y mañana el quinto, buen chaval, dale un abrazo
de mi parte si lo ves y dile que en el argot de la tauromaquia, no hay quinto
malo. ¡Qué tiempos aquellos Sento! He
perdido el contacto con muchos porque mi memoria pone rumbo al olvido. ¿Y que
es de tu librería? Ahora tengo entre manos un (poema de invierno) Mina y el
Conde Drácula. La noche es larga, la droga amarga. La política también es droga
y a veces, estimado, amarga. Ya sabes que tienes mi afecto y mi amistad que es
lo único que te puedo ofrecer y mi balcón para tomarnos una cerveza (tráetela
tu, así acertamos con tu gusto). Bueno hijo, ahora me viene a la memoria Pepe
Veiga y me emociono con su recuerdo ¿Dónde está? Siempre está. Un abrazo y
contéstame hombre.
POSDATA:
lee
amigo GUERRA Y PAU de LEÓN TOLSTÓI. (Te gustará).
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