Estar todos los días entre
este amasijo de letras es vivir en un mundo especial y es obligado el mimo que
merecen. Con ellas se curte el intelecto, generan entendimiento, a veces
acarician, denuncian a los infractores de la honradez, visten al desnudo de
cultura, sacian el hambre de famélicos de sapiencia y cimentan la tumba de la
ignorancia. Abrir un libro es entrar a un paraíso que conocido desconoces. ¿SE PUEDE ENTRAR?
Que bueno eres maestro. Siembras muchas cosas buenas y muchos pueden recoger cosechas abundantes.
ResponderEliminarQue verdad más grande lo de "CIMENTAN LA TUMBA DE LA IGNORANCIA".
ResponderEliminarHabría que entrar y no salir.
ResponderEliminarSiempre tienes la facilidad de aciertos indiscutibles. Este post es un ejemplo. Uno de tantos.
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