Después de tus vacaciones y ya reposada de tan sublime esfuerzo nada mejor que dedicarte este tiempo, que aún escaso, su premura hará posible que medites la importancia de otros tiempos. Ya sé que has disfrutado en ese pueblo imperial de la comarca que hace de su balneario su río y su historia, contar otras historias.
Profesora, espero sepas aceptar este galimatías de palabras que surcan el renglón recto para evitar la incomodidad de estar torcido, y a pesar de permanecer terso, en ningún caso asoma la altivez. Hay cariño y el verbo envuelto en cendal para no hacer raspaduras.
Gracias por aquella poesía que me emocionó, al menos que quede el reconocimiento público. Espero te deleiten estos versos.
Tu selecta vida amiga/ tiene alma de pobreza/ pasión que siempre me invade/y hasta duele mi cabeza/ mujer eres de oración/ del cristianismo que reza/ devoción que certifico/ sin poderme la pereza/. Un abrazo.
Que privilegio que te escriban estas cosas.
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