La cita de Gandhi es de
plena actualidad. Habría que repartirla a los que
diariamente se manifiestan reivindicando sus derechos. Hay que quitarse los
miedos y actuar con la fuerza de la razón, la razón de la fuerza ya la emplea
el Gobierno con determinaciones que hay que enmarcarlas entre el terror y el
horror. Y cuando Gallardón es capaz de decir, que gobernar es repartir dolor,
dolor causa sufrir a gobernantes que hacen posible traumatizar al pueblo con
decisiones propias de quien está asentado en el timo y embeleco. Este Gobierno
es un fraude con mayúsculas, y epígono de un socialismo especioso y falaz.
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