“La Emérita “vive, a pesar de las adversidades de algunos
abanderados de pasiones con el ímpetu herido. Y vive con mando en plaza. Mucho
hay dicho en lo poco escrito, pero habrá que decir lo que acontece y lo que no
sucede. La concisión de la brevedad no necesita hacer de las palabras la
necedad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario