La tarde invita al manejo
de las letras. Frio, silencio y soledad es el menú ideal para hacer uso de la
prosa, verso, o tal vez de amenizar estos momentos recordando al insigne Miguel
Hernández.
Aquí me tienes Miguel/En
esta tarde invernal/Otoño de hojas caídas/Memoria de lo infernal/ Patíbulo de
la conciencia/Donde el hambre criminal/ Sacio la sed de la sangre/En el cauce
celestial/Y en esta tarde Miguel/Cuando el frío atenaza/Que al enemigo le
sirva/Que no es el verso amenaza/Y que viva la memoria/De aquella muerte
imprudente/Que la vida te quitaron/Tu culpa ser inocente.
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