No me gustan los “caudillos”
en la vida política y alguno se debe mirar al espejo y preguntarse si en
democracia son normales comportamientos
de un estilo que apesta ha podrido. Alguno que su intelecto le permite “manejar
la manada” y convertirse en el Francisco Franco de la democracia. Y ese
proceder no tiene cabida en estos tiempos, y este que escribe no permitirá la
utilización de aquellas personas que menos dotadas que otras, son embaucadas al
cataclismo de lo no digno. Aquí lo que hace falta en la vida democrática son:
demócratas, y con esa vitola no viaja
por el pueblo el citado. Y a pesar de que hoy omito su nombre, cualquier
día se podrá leer en NEGRITA.
No me gustaría estar en su pellejo.
ResponderEliminarSi Evencio se refiere a algún político de nueva hornada le termina de abrir la tumba y si da el nombre lo sepulta. DESCANSE EN PAZ.
ResponderEliminarYo estaría encantado de que lo diera, porque Francos en esta época no se pueden votar.
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