LA GUADAÑA

Sigue la guadaña del Gobierno, con el recorte y el ajuste, sigue cosechando moribundos, y preparando la fosa común del pueblo libre de pecado. Y hasta es posible que la tierra cubra a los que todavía les queda un suspiro, ósea, vivos. Dramáticos momentos se avecinan, y lo que es peor, tengo la certeza, de que nadie en este país sabe por dónde camina. Es un cráter imposible de cerrar, pero también tengo la certeza, de que no todo es achacable al Gobierno. No hay nadie inocente, para que la totalidad de los gobernantes, sean culpables. Convictos y confesos. Es un enjambre de golfos de tercera división, que militan en la división del honor perdido. Auténticos fariseos, embalsamados de fatuidad, y exentos de humanitarismo, y amigos de la insolencia. Se labran el porvenir, y sin darse cuenta, EL POR LLEGAR.