Amparo Folgado tiene
quebraderos de cabeza con la lista que debe ver la luz la próxima semana. Entre
alguna rebelión y el desconocimiento de sus afiliados surge la inseguridad y el
estado poco propicio de indeterminación para algo que requiere todo lo contrario.
La candidata más atenta al folklorismo del
entorno, se encuentra en una situación compleja donde el error puede
llevar consigo la seguridad en la oposición. En el supuesto caso de que la
composición de la misma sea acertada -difícil
lo veo- mi criterio no difiere en
cuanto a la pérdida de la mayoría y el poder.
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