La vida te enseña todos los
días para que de la liturgia de aprender no sientas nostalgia. La sabiduría de
la vida es de tal perfección que para entenderla solo necesitas pararte a
pensar y preguntarte porque se está tan cómodo en el sofá, porque te relega a
no salir de casa, porque el conformismo es la ambición y hay tantos porqués que
todos se resumen con el paso del tiempo. En mi caso me detiene algún
documental, Ferreras con su “Al rojo vivo”, el Real Madrid y el espíritu de
Nadal. A veces dedico escaso tiempo a la religión de escribir para conseguir el
cabreo patrio y el fanatismo tenga su tiempo y su vida. En definitiva, la vida
se compone de pasajes para amontonar páginas del libro que nunca acabas.
“Vive y vivirás y aprendiendo morirás”.
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