Tengo la impresión de que el verano será
caluroso y tenso. Hay a mi juicio cierta perentoriedad en algunas cuestiones
que hace falta airear para que no mueran por abandono consentido. La
desidia que tiene parentesco con la dejadez, integradas las dos puede ser
el detonante que haga en la época vacacional, la eclosión de brotes de sensatez
para evitar que la calma no sea el relax de aforados al desprecio. A veces la
memoria evoca un mundo carente de civismo, al que hay que ponerle nombre y apellido.
Hará falta paraguas para evitar el tórrido verano. Sombras tenemos demasiadas.
ResponderEliminar¡Julio tormentoso PP VICTORIOSO!
ResponderEliminarSeptiembre sugerente PP decadente.
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