Alfred Costa es un “lince”
de oportunos momentos y tiene el valor del saber estar. Reconocido queda aunque,
yo soy solamente notario de comprimidos periodos de tiempo. “A
las aladas almas de las rosas del almendro de nata te requiero, que tenemos que
hablar de muchas cosas, compañero del alma, compañero”.
Tiene muchas cosas que no tienen los demás.
ResponderEliminarNo pertenece a la corriente de la vulgaridad y de ahí que sea distinto.
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