Me dice un amigo que la autocomplacencia en política, es el éxito del ignorante. Y la autocomplacencia del político es, el éxito del fracaso, todo sea por aportar algo más a lo menos. Y tratando de escrutar por esos borrascosos mundos, acabas por encontrar ejemplos de lo no ejemplar en los mejores “restaurantes” de la política. Evitaremos comer en ellos para evitar vómitos y diarreas. Pero la frase del amigo que tiene su enjundia, cuando alguno la lea puede verse identificado en ella, y seguramente -puede ocurrir- que no se quiera ver. Pero si es capaz de reflexionar unos minutos, aquí te ves para que te vean.
¿QUIEN SERÁ EL BENEFICIADO?
ResponderEliminar