l
Sequías
de paz,
Liberación
de la ira,
Muertes
que asoman y ven
Lo que
ver ya no se mira.
ll
Era
el aire espero con olor a incienso
En
el triste otoño que marcó el deceso.
Eran
días pálidos de libres y presos,
De hogueras,
llamas y orgullos perversos.
lll
No
vimos amanecer
Se fundió
rocío y vida
En el
crisol de la noche
Quedándose
el alba viuda
En
ese adiós sin huida.
lV
Hace
tiempo que busco el yermo
Para
encontrarle a la tristeza su alegría
Santo
lugar de su aposento
Y final
feliz de su agonía.
V
Mueve
el blando céfiro el rocío
Para
que el alba preste se despierte
Y encuentre
en el húmedo amanecer
El nacer
de otro día diferente.
Vl
Con
las manos en la tumba fría
Quise
darles mi calor
A cuerpos
ya congelados
Donde
descansa la muerte
Que vida le dio al honor.
Que vida le dio al honor.
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