Demasiadas visitas al
cementerio en el último mes y demasiadas preguntas en aquel entorno sin
encontrar respuestas. El último adiós fue para GUADALUPE CARRATALÁ
(D.E.P.), hermana de SAGRARIO CARRATALÁ con
la que me une una amistad entrañable. La vida pone a prueba a Sagrario y la
somete al dolor que supone la pérdida de seres queridos de los que acumula un
exceso de sufrimiento. Desde aquí, el más sincero abrazo unido al sentimiento y
con el deseo de que puedas vencer el desánimo y continúes luchando y demostrando tu fortaleza para
seguir viviendo y derrotar el desaliento. El aforo lleno de la Iglesia San José
confirmó que “algo tiene el agua cuando la bendicen”, y puedes sentirte
orgullosa de ese clamor de amigos y conocidos que querían estar al lado de la
familia en momentos en los que LUPE
encontraba el albor de la eternidad y dejaba la luz oscura del día. “La
muerte no nos roba los seres amados. Al
contrario, nos los guarda y nos los inmortaliza en el recuerdo. La vida sí que
nos roba muchas veces y definitivamente”. (FRANÇOIS MAURIAC).
No hay comentarios:
Publicar un comentario