Cuando en un lugar de
libertad te encuentras puertas cerradas es inconcebible que lo estanco sea la
referencia. Ese culto a las estrecheces de pensamientos petrificados es muy
privativo del PP. Lo único abierto que dejan es la ventana de la sede para que
se vea el cartel anunciador de “La dictadora” como Alcaldesa. Todavía
no se ha hecho el ánimo de que es Jesús Ros el Alcalde. Además, en el
partido agrietado no hay nadie que le diga que el “Toco mocho” ya no
cuela. En la calle, por lo que yo oigo, no la veneran, pero en el Comité el
pánico congela las lenguas. Ni ella es convincente ni el partido tampoco.
No sé si al día de hoy Jorge Planells y Naxo Carratalá siguen en el partido que
no cumple lo que promete. Lo preguntaré.
Han pasado dos años para que "la dictadora" se dé cuenta que no es la alcaldesa de Torrent Es una pobre infeliz aferrada a su fracaso.
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