martes, 10 de enero de 2017

¿QUÉ TAL, ALFRED?

  

¿Qué tal, Afred? ¿Cómo has pasado las fiestas? ¿Los Reyes? Estaba hablando con Evencio y preguntándole sobre esas cosas místicas que escribe, últimamente lo veo muy bíblico y nada mejor hijo, que preguntarte a ti de ese mundo que tú conoces bien como buen feligrés de la Asunción. Palabra de Dios. Habla Evencio de los pecados capitales ¿Tú tienes alguno hijo?  Conociéndote seguro que estarás limpio de alma, no te veo en el fragor de la soberbia, ni de la avaricia ni mucho menos de envidiar lo ajeno. Ahora que me acuerdo saludos a Campos, a Enrique quiero decirte. ¿Son tres los capitales pecados? Además, hijo, habla de Effetha y de nona.  ¿Qué es eso hijo? ¿Serán los nuevos de la próxima lista? Seguro que el Evencio conoce hasta San Mateo. Aprovecharé, hijo esta ocasión para pedirte, tú que dominas la plática, de forma serena y mirando a la gente (eso me dice Evencio), que des una conferencia en la SEDE SOCIALISTA de la Plaza de los Grilletes sobre el éxodo y el apocalipsis. Ya iré, hijo, a escucharte. 

2 comentarios:

  1. Excepcional post del Sr. Tortajada por sus características enjundicas. Fondo y trasfondo en el que dice mucho y no serán pocos los que no lo entiendan. Hace mucho tiempo que el escritor del aforismo nos deleita con una forma de escribir no usual. Que se abstengan los viejos compañeros de leeerlo por si piensan que el contenido nos trae el diluvio universal.

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  2. No es baladí el post del amigo Evencio.
    Dice tanto que satisface al lector más exigente.
    Está en vena este "maestro" de pueblo.
    Sitúa a Alfred en el mundo eclesiástico que tiene lo suyo, los recuerdos a Campos vivifican el ingenio de Evencio y los grilletes de los que no tienen libertad no tienen desperdicio, y el ¿Tú tienes alguno hijo? es espectacular.

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